José Vázquez Sánchez

Cortegana
Huelva

(Cortegana, Huelva, 1914 – Gusen, 1942)

José es el tercero de una familia de cuatro hermanos de nivel medio en la que primaban los oficios urbanos —él era impresor y su hermano sastre—. Cortegana con una población que superaba los 7.000 habitantes en 1931 era, junto con Aracena, el centro urbano más importe de la sierra de Huelva en donde los signos de distinción social recaían en una docena de grandes propietarios que monopolizaban, en gran parte, la oferta de trabajo. A pesar de que el caciquismo y las relaciones clientelares imperaban en los pueblos serranos, la conflictividad social crecía en paralelo a la exitosa articulación de las organizaciones obreras en la localidad que se significó abiertamente de izquierdas durante los años de la República.

La memoria familiar cataloga a José Vázquez como un joven inquieto que, sin pertenecer a ninguna organización política o sindical, simpatizaba con las ideas de progreso. Amante de la cultura y de la música: tocaba el piano y el saxofón en la banda del pueblo, tenía la ilusión de estudiar en un conservatorio de una gran ciudad.

El golpe militar de julio de 1936 le sorprende en Madrid mientras realizaba el servicio militar por lo que su participación en la guerra, en la defensa de la legalidad republicana, viene, no lo sabremos nunca, un tanto forzada por las circunstancias. En cambio, paradojas del destino, su hermano Daniel Vázquez, hombre de izquierdas, fue obligado a alistarse en las filas de los sublevados, una vez que Cortegana fue ocupada el 20 de agosto.

El rastro durante la contienda se pierde en la memoria familiar. Aparece nuevamente en el exilio francés, donde José envía cartas con regularidad avisando que está bien e, incluso, pide libros de gramática española porque daba clases de castellano. Se sabe que fue hecho prisionero de guerra en Alemania una vez consumada la invasión nazi del país vecino y destinado al Stalag XI-A de Altengrabow en Hannover. La deportación a Mauthausen se produce el 26 de abril de 1941 con el número de matrícula 3842 y el traslado definitivo al campo de Gusen el 4 de noviembre de 1942. Muere tres días después, probablemente gaseado, el 7 de noviembre, cuando contaba con 28 años de edad.

En 1968, muchos años después de que la Cruz Roja Internacional comunicara oficialmente la muerte de José Vázquez, la familia recuerda una visita a Cortegana de un francés, amigo de José, que había compartido vivencias en aquellos campos de la muerte. El viaje desde Francia hasta la sierra de Huelva de aquel hombre, que lo trató en sus días más aciagos, contempla la necesidad de los que sobrevivieron al infierno concentracionario de transmitir a la familia su testimonio de amistad. A pesar de todo, queda el pequeño consuelo de que José tuvo en sus últimos días, un amigo cercano que sintió su lenta muerte y lo llevó grabado en su memoria.